“Este es uno de esos partidos que no se pueden explicar”. Javi González Etxebarría habló así para comentar lo que pasó en el último tramo del partido que enfrentó a su equipo contra el Guijuelo. El Lemona, a pesar de jugar con un hombre menos, mandaba 2-0 en el marcador faltando 20 minutos para el pitido final. Sin embargo, el conjunto cementero sumó otra derrota más por culpa de un final de partido para olvidar.

No comenzaron mal las cosas para los rojinegros. Al poco tiempo del comienzo, Borja Navarro fusiló a Montero poniendo a su equipo en ventaja, cuando los jugadores aun no habían roto a sudar.

Poco después, era el Guijuelo quien lo intentaba mediante tiros lejanos. Valero e Iturralde lo intentaron pero sin suerte. Se cumplían veinte minutos del choque.

En ese momento, el Lemona se empezó a encontrar a gusto. Anuló completamente al Guijuelo y llevó peligro a la portería contraria. Muy activo se mostró Navarro, que tuvo una ocasión clara gracias a un pase en profundidad de Chopi.

Poco antes de que el árbitro mandara a los jugadores a la ducha, el equipo local mantenía el balón en las cercanías de la portería contraria.

En el minuto 50 tuvo lugar la jugada extraña del partido. Un balón con nieve que botó a escasos metros de la portería de Alcalde tuvo la culpa. Tras una serie de rechace, el balón terminó en la red del Lemona. El árbitro, no sin dudas, anuló el gol, pitó penalti y expulsó a Piette -destacado hasta entonces- por jugar el balón con la mano. Un nervioso Iturralde ejecutó el penalti para la posterior parada de Alcalde.

El Lemona siguió mandando y teniendo ocasiones. Suarez perdonó al rematar fuera una volea, y Ngako finalizó una jugada personal chutando desde el borde del área con destino la grada. Eran avisos.

En el minuto 63, tras una ocasión marrada por Koeman para el Guijuelo, llegó el segundo gol para los cementeros. Ngako botó una falta, Oinatz cabeceó en el segundo palo para que Markel Robles con la testa marcara. Alegría plena en la tribuna de Arlonagusia. Faltaba tiempo pero las cosas se estaban haciendo bien.

Entonces, apareció Jonathan. El lateral derecho apareció en el área lemoarra para batir a placer a Alcalde, luego de un pase desde la izquierda. Era el minuto 72 y los inevitables nervios aparecieron.

Lo contrario que los jugadores visitantes. El Guijuelo se vino arriba y en un final asombroso, voltearon el partido que tenían perdido. Valero con dos goles en el minuto 75 y 83 dejó boquiabierta a la audiencia, que se marchó del campo con la sensación de que cuando un equipo está en racha negativa, todo tiende a salir mal.

El Lemona rendirá visita al Zamora la semana siguiente con la misma actitud que contra el Guijuelo. Siendo así, los resultados acabarán llegando.

Lemona: Alcalde, Piette, Gurrutxaga, Gorka, Oinatz, Uranga, Suarez (Orbegozo m. 58), Markel, Navarro (Rebollo m. 80), Chopi, Ngako.

Guijuelo: Montero, Valero, Toño, Jonathan, Iturralde, Koeman, Víctor Abajo (Edu Espada m. 60), Gascón (Romero, m. 72), Molo, Eneko (Eloy m. 85), Tete.

Arbitró el señor Herrero Arenas, ayudado por Tresaco Escabosa y por Bosqued Lafita. Amonestó a Gorka y a Uranga por parte local y a Valero, Toño y a Eneko por el Guijuelo. Expulsó a Piette en el minuto 50 por cortar con la mano una jugada de gol.

Tarde agradable en Arlonagusia y césped en buen estado.